19/3/08

Más alla de la oscuridad

La noche expulsaba de sus guaridas a los más bohemios de la clase y los reunía en la casa de Cinthia. Es probablemente la última vez que algunos nos veamos las caras. El cole había terminado y cada uno tomaría rumbos distintos: chambear, entrar a la universidad, embarazarse y hasta tal vez volverse chivo o chiva según el género. Así que tenemos excelente excusa para emborracharnos hasta decir oe, te estimo, para declararse ante la fea del salón o tal vez para quedarse dormido abrazando el inodoro. Viendo el popurrí de tragos que ofrece la mesa intuyo que mi hígado terminara mal y la aventura muy bien, y mirando el escote de Vanessa me convenzo de tomar un vaso de cada trago y con ellos valor para intentar algo con ella ¡Que cobarde, caraxo! pienso, pero algo tengo que hacer y las botellas me hacen guiños desde hace buen rato. Uno, dos tres...uy que rico...cuatro, cinco...glup glup...seis, siete...y ya veo dos Vanessas. Ahora a cual le hablo? Sea como sea está el "doble" de riquisima.

Ensimismado en mis pensamientos no me doy cuenta que todos han hecho un círculo, que una botella está girando al centro y que Matilde me ha arrastrado al círculo y me ha puesto frente a ella, creo que para tentar un posible agarre, sí, es eso, la sonrisa que tiene de oreja a oreja la delata cuando la botella ha indicado que Karen me ordenará. Esta noche mis labios son como el vaso de chela en plena pollada, osea pasa por todos lados, no pues, tampoco se vayan a los extremos, de las muchachas nomas. Me quejo de algunos chapes de otros no, en todo caso siempre hay que hacer sacrificios pienso. Los picos se dan frente a todos y los agarres agarres se dan y reciben en el pasadizo que comunica la sala con los demás dormitorios. Ya me ha tocado ir una vez, y con Matilde para mi mala suerte. Se contenta con un piquito y luego le meto...otra vez pensando mal?...que le meto un cuentazo para no seguir. En medio de la bulla, la oscuridad y mis mentiras, veo unos ojos a los lejos mirandome desde la escalera hacia el segundo piso.

-Oe ya pues, que están haciendo? Tirando? Apurense - gritan los emocionados que aún no obtienen lo que quieren de la botella.
-Anda, yo voy al baño - le digo a Matilde quien inocente y sumisamente me hace caso y se va, su tamañito y su cabello rojizo ensortijado me hacen sentir que he besado a una niña de diez años.

Voy directo a la escalera al encuentro de ese par de brillantes ojos. Algo me tiene nervioso, pero no detengo mis pasos. Quiero saber porque me ha estado mirando desde la ventana y porque ha estado mirando ahora mientras abrazaba y floreaba a la niña Matilde. Escuchó sus pasos, lentos, frágiles, bajando escalón por escalón, su sutileza me mata y me encanta. Algo cae a mis pies y se enciende la luz.

-Ay...joven, me pasa mis dientes por favor? -me dice la abue de Cinthia.

Caraxo, una abuela me puso en Fa, pienso mientras le alcanzo los dientes.

-Hijito...estás bien? Estás paaaaalido...un vasito de agua?
-No señora, muchas gracias, no es nada no se preocupe, solo que me excité al verla.
-Qué?????????'
-Ah..no...que me asusté al verla.
-Qué?...ahora me dices que parezco un fantasma?
-No señora...como cree, es que la vi así de la nada.
-Ah...entonces soy fea? Además, no seas mentirosito porque bien que ya me habías visto desde que estabas con esa chiquilla por allá.
-Abue...sube, que haces abajo? -dice una tercera voz dulce y candida que se va haciendo más fuerte conforme baja las escaleras.

La tengo frente a mi y reconozco esos ojos. No es una niña, es una mujer.

3 comentarios:

Lovely_lonely dijo...

Jejeje... Asu..la abuelita..todo lo que hace el licor pue! =)

Lovely_lonely dijo...

Gracias por comentar en mi blog...el primer coment... q emocion snif snif! me encanta leerte..aun me falta un poco para terminar pero ahi le sigo! =) Saludos!

Anónimo dijo...

jajajajaja siempre ocurrente! sigo espewrando los datos del concurso. pkdo